por Malena Cuppari

Casi sin darnos cuenta estamos transitando el último tramo de un año que fue, por lo menos, particular. En este artículo te propongo que aproveches el mes de noviembre para hacer un balance de las experiencias que te tocó vivir en 2020 y, en base a eso, crees los objetivos que necesitás alcanzar para que el 2021 sea tu año.

Voy a ser sincera, el 2020 fue el primer año en que me senté a pensar los objetivos que quería alcanzar y los bajé a un documento. Lo hice en junio y estuvo buenísimo. Todo eso que venía leyendo y mirando en Youtube sobre el beneficio de pensar objetivos es absolutamente cierto. Te ayuda a enfocarte mejor, a tener un norte claro y reduce el margen de error significativamente.

La verdad es que siempre lo había hecho para mis clientes pero nunca para Mercurias. El resultado es que estoy en condiciones de decir que alcancé la mayoría de los objetivos que me propuse hace casi 5 meses y tengo un panorama más o menos claro de lo que tengo que ajustar para lograr los que me faltan. Desde ya que no tengo un punto de comparación porque no sé qué porcentaje de objetivos cumplí otros años porque nunca antes me había sentado a pensarlos a conciencia y a bajarlos de forma concreta para poder contárselo a mi equipo, o a unx amigx o a mi familia. Pero por suerte nunca es tarde. Hacerlo a mitad de año me funcionó de maravilla y es por eso que para el próximo año me gustaría ir un paso más allá y arrancar el 2021 con mi balance hecho y mis objetivos pensados. Les propongo que lo hagamos juntxs, solo tienen que seguir leyendo…

Objetivos SMART

Sentarte a pensar objetivos puede parecer algo fácil y obvio, pero les juro que no lo es. Tuve que leer bastante para entender cómo hacerlo de una forma que me sirva. La técnica que mejor me resultó hasta ahora y la que vengo usando hace aproximadamente un año es la de los objetivos SMART. Se trata de un modelo creado por George T. Dorian que se basan en la definición de objetivos inteligentes, posibles y eficaces. Justamente, el acrónimo SMART (inteligente en inglés) hace referencia a las cinco características que deben tener esos objetivos:

– [S]pecific (específico): cada uno de los objetivos que establezcas debe ser lo más concreto posible, para centrar tus esfuerzos en lograrlo.

– [M]easurable (medible): “Lo que no se mide, no se puede mejorar”, para que tus objetivos se puedan lograr y mejorar deben estar atados a un valor numérico.

– [A]chievable (alcanzable): en este punto hay que ser honesto con unx mismx (qué difícil, no cierto?). Está bien que tus objetivos sean ambiciosos, pero también deben ser posibles.

– [R]ealistic (realista): relacionado con el punto anterior, se trata de establecer objetivos que puedas alcanzar con los recursos, tanto humanos como materiales, con los que contás.

– [T]ime-related (acotado en el tiempo): un objetivo sin un plazo es solamente un sueño. Es muy importante calendarizar tus objetivos.

Entonces, repasemos:

Specific hace referencia a qué querés conseguir. Si no definís exactamente lo que querés no vas a poder describir los pasos que tenés que seguir para lograrlo. Para que un objetivo sea específico, deberías poder explicar en un tweet (280 caracteres) qué intentas lograr.

El punto measurable se refiere a cuánto, el valor numérico. Es fundamental que tu objetivo sea numérico y fácil de medir. Muchas personas dicen, por ejemplo, que quieren aumentar sus seguidores en redes sociales, pero no especifican cuál sería ese crecimiento. Si le pones un número a tu objetivo, vas a poder monitorizar exactamente cuánto avanzaste desde que estableciste el objetivo y cuánto te falta para alcanzarlo.

Por su parte, achievable se relaciona con el cómo. Recordá que no está mal que tus objetivos sean ambiciosos, pero es importante que sean realistas. Si normalmente tu marca suma 10 seguidores de redes sociales por mes, intentar atraer 1.000 el mes que viene sería casi inalcanzable. Esto podría provocar que te sientas abrumadx y desmotivadx con una meta tan ambiciosa. Para garantizar el éxito, creá objetivos que sean realistas.

Relevant es el por qué. Es importante que te preguntes por qué elegiste ese objetivo. ¿Cómo contribuirá a los resultados de tu proyecto? El objetivo que fijes debería poder vincularse directamente con el impacto que pretende generar. Si ese impacto no es el que esperás, cambiá o ajustá tu objetivo inicial.

El ejercicio consiste en analizar tus fortalezas, debilidades y ser consciente de los medios con los que contás. Lo ideal es que tus objetivos te motiven para que trabajar por conseguirlos sea más fácil y disfrutable.

Por último, timely se refiere al cuándo. Establecer un plazo de tiempo para alcanzar esos objetivos es indispensable, ya que es lo que te va a dar un cierto grado de presión. No se trata de estresarse, sino de establecer fechas que te ayuden y te motiven a que las cosas salgan adelante.

¿Cómo establecer objetivos SMART paso a paso?

Seguramente a medida que vas leyendo estos conceptos se te van ocurriendo algunas ideas sueltas, pero como con todo en la vida, hay que ir paso a paso.

1- Te recomiendo que empieces por un balance de lo que fue tu 2020. No importa que no tengas objetivos creados en el año anterior. Pensá cuáles fueron las metas conquistadas total o parcialmente y qué te gustaría cambiar o mejorar el año que viene. Anotá todo y por favor, celebrá los logros. Felicitate a vos mismx, agradecé a tu equipo o a quiénes te ayudaron a alcanzarlos. Es muy importante que valores tu esfuerzo y el de los demás.

2- Una vez que hiciste esto, empezá a establecer tus objetivos SMART 2021. La pregunta concreta en esta instancia es: ¿Qué querés lograr?

3- Ahora que ya sabes lo que querés lograr, tenés que pensar cómo y por qué. Adaptá ese objetivo a tus posibilidades, analizá tus debilidades y fortalezas (un análisis FODA te vendría bien en esta instancia). Hablá con colegas para entender si lo que querés lograr es posible en tu rubro. Si otros ya lo hicieron pueden contarte cómo lo lograron.

4- Elegí los indicadores para medir el objetivo. Acordate que si no lo podés medir, no lo vas a poder lograr, tenés que encontrarle la vuelta para medir cuantitativamente tus logros. Si tus objetivos tienen que ver con redes sociales, ya sabes que en este blog y en nuestra cuenta de Instagram vas a encontrar data muy útil que te puede ayudar.

5. Por último, calendarizá tus objetivos, ponete plazos y creá hitos que puedas volcar en tu agenda/calendario digital. Comprometete tanto con tus objetivos como con tus fechas.

3 ejemplos de objetivos SMART

Si todavía tenés las ideas un poco mezcladas, no te preocupes. Te dejamos 3 ejemplos de objetivos SMART para que entiendas un poco mejor:

“Aumentar las visitas de nuestro sitio web en un 50% (de 1.000 a 1.500) en los siguientes 30 días, al duplicar la distribución de contenido y con el fin de prepararnos para el lanzamiento de nuestro nuevo producto”

S: Aumentar las visitas de nuestro sitio web en un 50%

M: 50% (de 1.000 a 1.500)

A: Duplicando la distribución de contenido

R: Prepararnos para el lanzamiento de nuestro nuevo producto

T: En los próximos 30 días

“Crear 8 alianzas estratégicas en el próximo año por medio de la organización de foros, y así obtener más exposición de marca y mejorar la red de proveedores”

S: Crear alianzas estratégicas

M: 8 alianzas estratégicas

A: Por medio de la organización de foros

R: Obtener más exposición de marca y mejorar la red de proveedores

T: En el próximo año

«Aumentar las ventas en un 20% (de $200.000 a $240.000) en los próximos 12 meses, ofreciendo nuestros nuevos productos a los clientes existentes.»

S: Aumentar las ventas en un 20%

M: 20% (de $200.000 a $240.000)

A: Ofreciendo nuestros nuevos productos a los clientes existentes

R: Aumento de ventas y retención de clientes

T: En los próximos 12 meses

¡Ahora te toca a vos!

Como siempre, no hace falta que sigas las reglas al pie de la letra, sólo que uses la técnica para poder crear objetivos concretos que te motiven y te ayuden a trabajar más enfocadx. Por supuesto que esta técnica puede usarse en cualquier aspecto de tu vida, no solo en lo laboral. Te proponemos que te tomes noviembre para pensar qué te gustaría lograr en el futuro y te lo propongas. El cielo es el límite.